El mundo de los jabones es muy amplio, desde las opciones comerciales hasta las artesanales, desde lo más natural hasta la incorporación de ingredientes muy complicados. De cualquier manera…
Los jabones artesanales, son un reto para la creación pues el proceso de saponificación y los ingredientes que se incorporen a la formula, hacen que tengamos una amplia variedad de resultados.
El mundo de los jabones es muy amplio, desde las opciones comerciales hasta las artesanales, desde lo más natural hasta la incorporación de ingredientes muy complicados. De cualquier manera…
Los jabones artesanales, son un reto para la creación pues el proceso de saponificación y los ingredientes que se incorporen a la formula, hacen que tengamos una amplia variedad de resultados.
El jabón en la historia antigüa
En la antigüedad, para la higiene se utilizaban agente limpiadores como la ceniza de la corteza de los árboles y el cebo de cabra.
Luego en la edad media, el jabón utilizado para lavar la ropa era una mezcla de agua, ceras y aceites vegetales o de animales.
Esta fórmula se fue divulgando y adaptando, hasta que apareció una nueva versión que consistía en agua de ceniza de madera y de betarraga, lo que daba un detergente realmente eficaz.
Más tarde aparecieron los jabones duros y con colorantes, que las egipcias utilizaban para teñirse el pelo y darle brillo.
Aparecen los primeros jabones, como los conocemos ahora
Años después, en Francia se reemplazó el cebo o grasa de animales por el aceite de oliva.
Para ese entonces también apareció el jabón de Marsella, que fue el precursor de los jabones actuales y que contenía mezclas de huesos (ricos en potasio) y grasas vegetales.
En 1973 surgió un nuevo proceso: aceite de oliva hervido con oxido de plomo, que produjo una sustancia de sabor dulce conocida como glicerina.
Jabón de tocador
El jabón de tocador más que un simple producto de limpieza es todo un cosmético que además de proteger la epidermis promete embellecer su aspecto. Los jabones cremosos otorgan suavidad y frescor en la piel; otros, con aceites y agentes hidratantes y humectantes suavizan la epidermis.
El jabón es un producto de limpieza a partir de la reacción de saponificación entre grasas y aceites con álcali. En la preparación de jabones solubles en agua se emplea hidróxido de potasio, con lo que se obtienen los llamados jabones blando y con hidróxido de sodio jabones duros.
Como se observa en la figura anterior, la saponificación es una reacción química entre un ácido graso y una base, en la que se obtiene como principal producto la sal de dicho ácido y de dicha base.
Estos compuestos tienen la particularidad de ser anfótero, es decir tienen una parte polar y la otra no polar, con lo cual pueden interactuar con sustancias de propiedades dispares.
La acción limpiadora de los jabones se debe a que disminuyen la tensión superficial del agua. Esto se atribuye a que la parte hidrófila del jabón se disuelve en agua, y la parte hidrófoba de la molécula va formando una emulsión alrededor de las partículas de suciedad, las cuales pueden ser arrastradas por el agua.
[embedyt] https://www.youtube.com/watch?v=5ugFBNCdbCM[/embedyt]Características de un buen jabón
En un jabón de tocador son deseables las siguientes características:
Buena capacidad como limpiador
Espumante y emulsionante
Ph neutro o cercano al normal de la piel (5.5)
Diseño anatómico fácil de manejar
Agradable olor
Jabones artesanales
El jabón artesanal no tiene productos químicos y está elaborado con aceites y grasas vegetales puras, como los de oliva, almendras, germen de trigo, coco, entre otros. A esta formulas se le agregan otros ingredientes naturales como extractos de plantas medicinales y/o aromáticas, vitaminas, cereales, miel, arcilla y algas, entre otras, que añaden a su función limpiadora beneficios adicionales.
Descripción de algunos ingredientes usados en los jabones artesanales
Aceite esenciales: son sustancias volátiles altamente concentradas y perfumadas, obtenidas por los métodos de destilación o presión en frio de flores, hojas, frutos, cáscaras, tallos, etc.
Glicerina: fluido transparente e inodoro que se disuelve en agua o alcohol. Ayuda a mantener la humectación de la piel.
Hidróxido de potasio: sólido cáustico blanco utilizado en la fabricación de jabones suaves o líquidos.
Hidróxido de sodio: sólido cáustico blanco utilizado en la fabricación de jabones duros.
Manteca de cacao: se obtiene a partir del grano de cacao, que es molido y prensado en el proceso. Por sus propiedades suavizantes y humectantes sobre la piel es muy utilizada en cosmética.
Miel: actúa humectando y suavizando la piel. Por ser ligeramente antiséptica, es apropiada para pieles grasas.
Características que pueden llegar a brindan los jabones artesanales.
Antioxidante: impide o retarda la reacción de una sustancia al oxígeno. Inhibe la oxidación y el daño causado por los radicales libres.
Hipo alergénico: que es poco probable que cause una reacción alérgica
Humectante: sustancia que atrae y retiene la humedad, tal como la glicerina.